Voluntariado Joven 2013

Día 9 de junio de 2014. Lunes. 

Quien algo quiere, algo le cuesta.

Hablé con Marcelo y  me aconsejó ir por Tupiza, que aunque muchas más horas, pero era más seguro y no tendría que andar esas dos horas sola por no sabemos dónde.

Decidí comenzar con paciencia, primero llegar a Potosí (3 horas). El viaje fue tranquilo, quería llegar temprano a Tupiza por si no encontraba combinación, así que en vez de ir en flota desde Potosí, fui a buscar un suruví (es como un monovolumen, cuando se llenan salen y son más rápidos). Este tardó en llenarse… pero bueno. En dos horas y media estaba en Cotagaita, y aunque no estaba planeado, me botó! Yo era la única pasajera que iba a Tupiza, así que no le salía a cuenta, pero me “despachó” (como dicen acá). Claro que la faena fue que tuve que esperar de nuevo a llenar el otro suruví! Llegué a Tupiza a las 18.50h habiendo almorzado 3 plátanos y unas galletas, y a las 19h salía una flota para Uyuni, así que ni tiempo de cenar! Por suerte, en esta flota subieron ofreciendo rico charke, menos mal, porque hasta Uyuni eran 7 horas!!!! Era una ruta alternativa, así que os podéis imaginar… llenito de baches, ni idea de por dónde andábamos… la luna casi llena me daba pistas del paisaje, y al final, de tanto cansancio hasta logré dormir un rato. A eso de las 22h la flota se paró en Atocha y nos cambiaron de bus.. el frío era INCREIBLE, pero casi que hacía el mismo fuera que dentro de la flota, porque dentro del bus los cristales llevaban una capa de hielo de casi un centímetro! Sí sí… por DENTRO! Yo me metí en el sleeping y aun así iba congelada.

La llegada a Uyuni no fue mucho más agradable: -7ºC, las 2 de la mañana y nadie por las calles (obviamente). Me costó encontrar alojamiento, y al final acabé en uno recaro, pero jolín, ¡Qué maravilla! Con calefacción, agua caliente, y sábanas de franela… las mejores 6 horas de sueño desde hace tiempo!